Este es un blog personal para escupir algunas ideas, responder algunos ataques, corresponder algunas caricias, y combatir casi todas las opiniones

sábado, noviembre 26, 2005

La escuela es una comunidad de lectores… o no es escuela

Una comunidad de lectores es un conjunto de ciudadanos íntimamente ligados al consumo y a la producción de textos por desarrollo personal y desarrollo profesional. Estos textos llegan tradicionalmente a nosotros en forma de libros, aunque hoy existen otros soportes de divulgación.
Una comunidad de lectores se hace visible en una sociedad cuando palpita en ella una cultura libresca, con editoriales activas, cadenas de librerías formales, páginas de diarios y revistas dedicadas y espacios en la televisión y en la radio dedicadas al comentario de lo que se publica, debates sociales sobre las investigaciones hechas públicas.
¿Existe esto entre nosotros?
No
Si la escuela y la universidad no han sido capaces de generar comunidades de lectores, entonces ¿cuál ha sido y es su propósito? ¿No busca, la educación, fomentar la creatividad, la ambición de desarrollo humanístico, la actitud científica, la búsqueda de nuevos conocimientos? ¿Y acaso es posible imaginar todo lo dicho anteriormente sin lectura?
La visible ausencia de comunidades de lectores en el Perú es una de las más clamorosas evidencias del fracaso de la educación escolar y superior, pública y privada.
Los programas educativos se han equivocado al suponer que sólo las áreas de lenguaje, comunicación integral o literatura, son responsables del desarrollo de las habilidades para comprender y desarrollar textos.
Esta actitud ha liberado a los profesores de física, química, matemática e, incluso, historia, de la responsabilidad de explorar las ideas que sus estudiantes tienen de sus cursos y sus temas; de examinar (y evaluar) sus opiniones, hipótesis o descubrimientos, a partir en textos que sumen coherencia lógica a elocuencia estilística.
En el seno de las asignaturas que no son del área de comunicación, existe la excusa recurrente según la cual la responsabilidad de estos maestros no es “enseñar a leer o escribir”.
Un maestro que no forma parte de una comunidad de lectores es un profesional limitado que no lee ni escribe.
¿Por qué un profesional de la educación no lee ni escribe?
En general, un profesional que no lee ni escribe, es decir, un profesional funcionalmente analfabeto, no practica la escritura porque carece de ideas para divulgar y de conocimientos para exponer y esto es una consecuencia de su ausencia de lecturas y de investigación.
Una de las mejores formas para incorporar a los maestros a una comunidad de lectores es creando clubes de lectura y talleres de escritura creativa para los maestros, en el interior de los colegios.
Fomentar el espacio para la discusión abierta y libre, de lecturas; el intercambio de libros; son algunos de los recursos a los que debemos apelar para recuperar el prestigio que ha perdido el privilegio de ser parte de una comunidad de lectores.
La promoción de librerías familiares es otro paso importantísimo. Los chicos tienen derecho a que en sus casas existan bibliotecas familiares. El uso de libros prestados confiere al libro una condición de temporalidad que no corresponde con el aprecio al objeto que tienen los miembros de una comunidad de lectores.
Un libro debe ofrecer la posibilidad de su relectura, de su hojeo, y de su préstamo.
Una biblioteca personal es un objeto en si mismo y una marca de prestigio.
Solo alguien con biblioteca personal sabe del orgullo silencioso que se siente cuando alguien nos pregunta ¿y todos estos libros has leído?
Hacer que ese orgullo sea más común es también una de nuestras tareas.

2 comentarios:

Juan Lapeyre dijo...

A pesar de mi amor por la escritura y la lectura, creo que simplificas demasiado. No es una comunidad de lectores o clubes de escritura lo que se necesita. Eso es solo parte del problema. Hay un problema básico en quienes, como nosotros, hemos sido educados con libros: creemos que todo se arregla leyendo o haciendo libros. Eso nos ha cambiado, pero eso no cambia a todos. No a todos les va a gustar un libro, nunca, ni siquiera al 30% de las personas. Y recordemos que un mundo gobernado por gente que lee no ha existido sino desde hace ¿doscientos años? ¿menos? Y no necesariamente estamos mejor en algunos aspectos. Creo que la lectura es PARTE de la solución, pero no la solución. Así como la tecnología es parte de la solución, como la formación científica es parte de la solución, el mejoramiento de las capacidad de expresión oral, etc., etc. Lo mejor es juntar quienes trabajan por diversas partes de la solución y empezar a trabajar juntos o, al menos, a compartir ideas. Me encanta ser entusiasta, pero me preocupa que las cosas REALMENTE cambien.
Gracias.

sobrenatural dijo...

Te cito:
Así como la tecnología es parte de la solución, como la formación científica es parte de la solución, el mejoramiento de las capacidad de expresión oral, etc., etc.

Todos estos conocimientos se cifran, se codifican, y se fijan en un texto que se lee. Si no eres capaz de leer, no serás capaz de comprender. No hablo de leer literatura, hablo de leer, incluso literatura. Entra a escritoresenelpatio.blogspot